El apodo con el que Franco Colapinto bautizó a Flavio Briatore tras su primer día en Alpine
El piloto argentino vivió una jornada inolvidable en su primer día en la escudería francesa, marcada por su conexión con el icónico empresario italiano.
Franco Colapinto, el joven talento argentino del automovilismo, inició su etapa en Alpine con un día lleno de emociones en las instalaciones de Enstone, Reino Unido. Durante su primera jornada, no solo recorrió la fábrica y probó el simulador del equipo, sino que protagonizó un peculiar momento al bautizar con un apodo a Flavio Briatore.
A través de su cuenta de X, el pilarense compartió una publicación donde usó "Il Padrino", pare referirse al asesor ejecutivo del equipo francés. El gesto fue rápidamente interpretado como un cariñoso sobrenombre, inspirado en la encuesta organizada por un grupo de fanáticos del piloto, quienes habían propuesto ese mote para Briatore.
La interacción reflejó la buena relación que el joven argentino parece haber establecido con el exdirectivo de Renault y Benetton, conocido por su rol clave en los títulos de Michael Schumacher y Fernando Alonso.
El vínculo entre ambos no es casual: el italiano fue una pieza fundamental en las negociaciones que llevaron al joven de 21 años a formar parte de Alpine, lo que quedó evidenciado en la cálida bienvenida que le dio al piloto en redes sociales. “Bienvenido Franco al equipo Alpine”, escribió Briatore, a lo que Colapinto respondió con entusiasmo: “Andiamoooo grazie Flav, Vamos!!”.
Durante su visita, también tuvo la oportunidad de experimentar el simulador del equipo, una herramienta clave para su adaptación y desarrollo en la Fórmula 1. “Es emocionante estar acá. Aprender con el simulador es vital para entender el auto y seguir mejorando”, declaró el piloto, quien destacó su compromiso de colaborar con el equipo en todos los aspectos necesarios para mejorar el rendimiento del monoplaza.
Otro momento destacado fue cuando posó junto al Renault R25, el auto con el que Fernando Alonso ganó el campeonato en 2005. Este gesto simbólico reforzó el sueño del argentino de contribuir a llevar a Alpine a lo más alto de la competencia, siguiendo los pasos de grandes figuras de la escudería.
En su primera entrevista oficial con el equipo, el argentino dejó en claro su motivación: “Es un placer ser parte de Alpine. Vamos a trabajar duro para devolver al equipo a los primeros planos y luchar por campeonatos. Estoy agradecido por esta oportunidad y comprometido con el futuro de esta escudería”.
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