Detuvieron al presidente destituido de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol
El mandatario fue arrestado en la residencia presidencial de Seúl a más de un mes de su fallida declaración de la ley marcial.
Yoon Suk-Yeol, presidente de Corea del Sur
El presidente destituido de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, fue detenido este miércoles tras varias horas de tensión, en un impresionante operativo montado en la residencia presidencial de Seúl. Su arresto se da 43 días después de que el mandatario declarara la ley marcial en el país asiático y desatara un caos político a principios de diciembre.
La detención produjo en un segundo operativo liderado por la Oficina para los Casos de Corrupción de Altos Funcionarios (CIO, por sus siglas en inglés), luego de que fallara un primer intento de arrestarlo a principios de mes.
Medios surcoreanos mostraron en vivo el momento en el que Yoon era trasladado a bordo de una camioneta negra en medio de un impresionante operativo de custodia policial.
Tras su detención, Yoon fue trasladado en un convoy al edificio de la CIO en Gwacheon, al sur de Seúl, donde comenzó el interrogatorio.
Durante dos horas y media, el interrogatorio fue llevado a cabo por Lee Jae-seung, vicejefe de la CIO, con la presencia de los representantes legales de Yoon. Sin embargo, tras dos horas y media, el presidente destituido se negó a declarar, según informó la agencia de noticias Yonhap.
"Tengo entendido que se está negando a testificar", informó un funcionario de la Oficina de Investigación de la Corrupción de Funcionarios de Alto Rango a los medios locales sobre la falta de colaboración del mandatario.
Según se informó, los investigadores tienen un plazo de 48 horas, desde el momento de su detención, para solicitar una orden de arresto oficial en su contra.
Yoon, de 64 años, es el primer presidente de Corea del Sur en ser detenido en funciones.
Tras el operativo de arresto, se hizo pública una declaración del mandatario indicó que aceptó someterse a un interrogatorio para evitar "cualquier desagradable derramamiento de sangre", aunque denunció que están realizando una "investigación ilegal" en su contra.
El primer intento de arresto se llevó a cabo el 3 de enero y fue frustrado por el Servicio de Seguridad Presidencial (PSS, por sus siglas en inglés), luego de un enfrentamiento que duró seis horas.
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