El padre que golpeó a su hija por no usar casco se arrepintió: "No me pude controlar"

"Me siento muy mal por no poder recuperar la confianza de mi hija", agregó el hombre tras reflexionar sobre la violencia física y verbal con la que reprimió la impruencia de la adolescente.

"Quiero aclarar que no fue mi intención", dijo sobre su reacción desproporcionada, ya que siguió a su hija en su auto y cuando la tuvo al lado estacionó su vehículo y la derribó a ella del suyo, tras lo cual confesó que "fue una patada y un cachetazo que fue demasiado lejos".

Qué pasará con la moto de los Martínez

Desde su casa en Saladillo Martínez anunció que piensa poner a la venta la motocicleta que le regaló a su hija, a sabiendas de que con 15 años la adolescente aún no comprende la importancia de usar casco, y que él no quiere "que ella se mate".

"Ojalá que los padres tomen conciencia con el tema de las motos porque está todo muy complicado", convino el hombre tras convertirse en el primer -y último, esperemos- obstáculo contra el que chocó su hija en moto.

Cómo fue la secuencia de terror en Saladillo

"¿Cómo le va a pegar así en el sueldo? ¿Sos tarado?", lanzó uno de los testigos de la escena de la semana pasada, a lo que el hombre ofreció la explicación menos esperada sobre por qué derribó a su propia hija a los golpes.

"Pero yo estoy criando a mi hijo y no quiero que se mate. Prefiero pegarle una piña, ¿entendés?", convino el hombre al intentar irse de la escena, que se desarrolló cerca de las 21 en la calle Belgrano y Almafuerte.

"Pero a un chico, no a una chica...", quiso señalar una testigo, a lo que el hombre repitió a los gritos: "Prefiero pegarle una piña y que no se mate. Por favor, entendé. Si vos sabés los hijos que tenés... No quiero que se mate, querida".