Escapadas: el pueblo a 100 kilómetros de Buenos Aires ideal para ir a comer

Turismo

Cerca de la Ciudad se encuentra una encantadora localidad que se convirtió en el destino perfecto para los amantes de la gastronomía.

Azcuénaga, una pequeña localidad en San Andrés de Giles, es la nueva meca gastronómica a solo una hora y media de Buenos Aires. Con su ambiente relajado y su propuesta culinaria variada, se ha ganado un lugar en el corazón de los porteños que buscan un escape diferente. Este pueblo es ideal para desconectarse del ritmo acelerado de la ciudad y disfrutar de la tranquilidad del campo, acompañado de buena comida y una atmósfera pintoresca que evoca tiempos pasados.

Lo que hace único a Azcuénaga es su arquitectura colonial y la calidez de su gente, lo que brinda una experiencia auténtica. Los restaurantes locales ofrecen platos típicos de la región, como asados al aire libre, pastas caseras, y opciones internacionales, lo que atrae a un público variado. Ya sea que busques un almuerzo de campo o una cena romántica, este destino ofrece opciones para todos los gustos, convirtiéndose en el plan perfecto para una escapada de fin de semana.

Los lugares recomendados para ir a comer en "Azcuénaga"

Si decidís visitar Azcuénaga, hay tres restaurantes imperdibles que se destacan por su oferta gastronómica y su ambiente acogedor.

  • El Almacén CT&Cia: Un clásico de la zona, este restaurante es conocido por su variada carta de platos caseros. Podés disfrutar desde asados hasta pescados frescos, ideales para acompañar con una buena copa de vino. Los fines de semana, se llena de visitantes que buscan una auténtica experiencia culinaria.

  • Le Four: Este lugar ofrece una propuesta francesa con un toque rústico. Aquí, podés probar carnes como pernil y conejo, así como sopas de cebolla y otros platos inspirados en la cocina europea. El ambiente es perfecto para aquellos que buscan algo diferente en el corazón del campo.

  • Restaurante La Porteña: Especializado en pastas caseras, es famoso por sus sorrentinos y ravioles, además de sus platos cocidos al disco de arado. Este restaurante es ideal para disfrutar de una comida reconfortante después de un paseo por el pueblo.

Estos lugares representan la riqueza cultural y gastronómica de Azcuénaga, y son una parada obligatoria para quienes visitan la zona.

Qué hacer en "Azcuénaga"

Además de disfrutar de su oferta gastronómica, Azcuénaga invita a pasear por sus calles tranquilas y descubrir su patrimonio arquitectónico. Las casas coloniales de Azcuénaga, construidas en su mayoría por inmigrantes italianos, conservan detalles únicos, como rejas de hierro forjado y sótanos para almacenar vino. Este pintoresco pueblo, rodeado de verdes campos, es perfecto para quienes disfrutan de la fotografía y buscan capturar la esencia del campo bonaerense.

Para llegar a Azcuénaga, basta con tomar la Ruta Nacional 8 hasta Solís y luego continuar por la Ruta Provincial 193. Este corto viaje de aproximadamente 100 kilómetros hace que sea una escapada fácil y rápida desde Buenos Aires. Ya sea que quieras disfrutar de un día de picnic, hacer una caminata tranquila o simplemente desconectar, Azcuénaga es el destino ideal para un fin de semana diferente.

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